- De acuerdo con el más reciente informe del Instituto Nacional de Salud (INS), a cierre de 2023, la tasa de donantes por millón de habitantes pasó de 6,4% a 7,4 % con un aumento del 1%. 4.002 colombianos conforman la lista de espera. El riñón es el órgano más requerido.
- Según Fundonar Colombia, aún prevalecen mitos que impiden que más familiares de personas que fallecen se opongan a la donación. Resulta necesario conocer la legislación, así como el beneficio que tiene una persona que recibe un trasplante.
- Actualmente se estudia en el Congreso la ley 55 vidas que busca aumentar el potencial de donantes, al incluir como criterio la parada cardiaca. En la actualidad las personas que presentan muerte cerebral son las que se consideran aptas para ser donantes de órganos.
Aunque en Colombia la donación de órganos presenta una leve recuperación posterior a la pandemia, el tema continúa siendo un desafío para las familias en el momento de decidirse a autorizarla cuando se presenta la muerte de un ser querido. Según datos del Instituto Nacional de Salud, INS, el crecimiento del 17 % en el total de trasplantes realizados en Colombia, le permite al país regresar a las cifras del año 2019, cuando se realizaron en total 1.303 trasplantes. Las estadísticas muestran crecimiento al cierre del año 2023 con 1.394 trasplantes distribuidos así: riñón 933, corazón 99, hígado 293, pulmón 36, intestino 1, riñón-corazón 3, riñón- hígado 14, riñón - páncreas 15.
No obstante, más de 4.000 colombianos, continúan en lista de espera del Instituto Nacional de Salud y tienen en la donación una oportunidad de salvar su vida o recuperar la calidad de la misma. De acuerdo con los especialistas prevalece el desconocimiento del proceso, así como los mitos que obstaculizan el proceso de donación proveniente de pacientes que son declarados en muerte encefálica o cerebral, criterio con el cual se opera hoy en Colombia.
Además de la opción de donante vivo, existen otras alternativas. Actualmente cursa un proyecto de ley en el Congreso de la República conocido como la Ley 55 vidas que busca incluir a la parada cardiaca como uno de los caminos para incrementar las tasas de donación. Los representantes a la Cámara Alejandro García y Julio César Triana radicaron en septiembre de 2023, un proyecto de ley que tiene como propósito incluir en el marco jurídico existente a personas que mueren tras una falla cardiaca como potenciales donantes y así ampliar la disponibilidad de órganos vitales en el país.
De acuerdo con la doctora Ximena Escobar, médica y cirujana de la Universidad Militar, actual directora ejecutiva de Fundonar Colombia, mitos relacionados con el tráfico de órganos, la supuesta oposición de la religión, la desfiguración de los cuerpos o la creencia de que los trasplantes son exclusivamente para personas con alto poder adquisitivo, solo por mencionar algunos de los errores frecuentes, son elementos culturales que afectan este proceso donde la calidad de vida de las personas que requieren un trasplante se encuentra en riesgo. Resulta fundamental que la población comprenda que la compatibilidad entre donante y receptor a fin de evitar rechazos es el criterio que prima a la hora de asignar un órgano entre los pacientes que conforman la lista de espera.
La Ley 1805 de 2016 presume que todos los colombianos mayores de edad son donantes. Sin embargo, la respuesta afirmativa de las familias continúa siendo respetada. Ellos tienen la última palabra, señala la médica y cirujana Ximena Escobar, magister en donación de órganos, tejidos y células de la Universidad de Barcelona, quien aclara los mitos más comunes que manifiestan los colombianos cuando son consultados para que autoricen la donación tras la pérdida de un ser querido.
Mitos y realidades frente a la donación de órganos
La doctora Ximena Escobar desmitifica aquellos conceptos frecuentes en torno a la donación de órganos con fines de trasplante que suelen circular por redes sociales o series de televisión para evitar confundir a los colombianos. Nuestro trabajo, señala la directora ejecutiva de Fundonar, es “promover la investigación, formación y fomento de la cultura de la donación, por eso consideramos fundamental hacer claridad en la población sobre las ideas equívocas que se tienen frente a este proceso que requiere procedimientos médicos de alta complejidad, intervención de especialistas y logísticas muy específicas en los que Colombia está a la vanguardia para ofrecer cirugías que transforman la vida de los pacientes”.
1. Tráfico de órganos: No existe el tráfico de órganos ni tejidos con fines de trasplante en Colombia. Es un procedimiento de alta complejidad que requiere:
- Infraestructura especializada, quirófanos, instrumental, salas blancas y asépticas, personal especializado y capacitado para la adecuada extracción y trasplante en el receptor. Estos procedimientos NO se pueden realizar en bodegas, containers o baños, como algunos medios o redes sociales lo hacen circular de manera errónea.
- Tiempo de isquemia de cada órgano, los órganos no se guardan en bancos, deben ser trasplantados en un tiempo corto para asegurar su funcionamiento en el receptor.
- Toda la gestión de la donación de órganos y tejidos tiene un registro a nivel nacional liderado por el Instituto Nacional de salud, dependencia del Ministerio de Salud, y por las Secretarías de Salud departamentales o distritales.
- Nunca el Instituto Nacional de Medicina legal o la Fiscalía han reportado cuerpos de fallecidos que hayan sido víctimas de extracción de componentes anatómicos de manera ilegal o sin autorización de la persona en vida o sus deudos.
- El artículo 15 del decreto 2493 de 2044 prohíbe cualquier tipo de remuneración en dinero o especie por la donación de componentes anatómicos. Este es un acto voluntario y altruista en beneficio de los pacientes en lista de espera para quienes los trasplantes tampoco tiene costo el trasplante ya que está cubierto por el Plan Obligatorio de Salud.
2. Mi religión se opone a la donación: La posición acerca de la donación con fines de trasplante, varían de una religión a otra, pero en su mayoría apoya la donación de órganos y tejidos como un acto de amor y misericordia hacia el prójimo después del fallecimiento. Como por ejemplo en la religión católica o cristiana que entiende la donación como “una de las expresiones más altas de compasión y generosidad”.
3. Queda desfigurado el cuerpo cuando se dona: Esto es falso. La extracción de órganos y tejidos es un procedimiento quirúrgico realizado con toda la técnica y mayor respeto al cuerpo del donante. Queda solo una cicatriz, como en cualquier cirugía y se colocan prótesis en casos como el de la donación de tejido corneal o tejido óseo. Todo esto con el objetivo de conservar la estética de la persona fallecida.
4. Los trasplantes solo son para las personas que tienen dinero: Falso, ya que todas las personas tienen derecho y acceso a un trasplante en caso de necesitarlo. Son tratamientos cubiertos por el Plan Obligatorio de Salud, por lo tanto, hay pacientes en lista de espera tanto del régimen subsidiado como del contributivo. No se paga nada por recibir un trasplante y no se pueden mover influencias para acceder a un órgano para trasplante, ya que se asignan solamente por compatibilidad es decir el órgano va a ser trasplantado a la persona que sea más parecido genéticamente al receptor y que tenga menos riesgo de rechazar el órgano trasplantado.